En el artículo de la semana pasada veíamos que el SP500 estaba raro y ahora sabemos que se estaba guisando una corrección. No sabemos que profundidad va a tener, pero lo importante es mojarnos lo menos posible mientras llueve.
En la sesión del viernes, el SP500 acabó haciendo nuevos máximos históricos, superando a los del pasado 15 de julio. Sin embargo, en esta ocasión tengo la impresión que la amplitud de mercado no acompaña claramente al precio.